jueves, 19 de abril de 2012

Palumba.


Conozco a la humildad. Es una persona, para ser más exacta una mujer, esbelta, con pelo negro y ojos intensos, ¿sabéis a que ojos me refiero? A esos ojos que te dejan ver más allá de ellos.
Posee un don, pero ella no lo sabe, ni se imagina lo especial que es. A veces conversamos sobre este tema, claro está que ella desconoce todo esto, sabe que es buena persona pero nunca imaginaria que es la humildad con forma humana.
La humildad amiga mía, tengo suerte lo sé.


Se equivocó la paloma,
se equivocaba.
Por ir al norte fue al sur,
creyó que el trigo era el agua.
Creyó que el mar era el cielo
que la noche la mañana.
Que las estrellas rocío,
que la calor la nevada.
Que tu falda era tu blusa,
que tu corazón su casa.
(Ella se durmió en la orilla,
tú en la cumbre de una rama.)


Rafael Alberti

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